La durabilidad y la resistencia a los golpes son características clave que los hombres buscan en un reloj. Los relojes para hombre están diseñados para resistir el desgaste diario, así como para soportar impactos y golpes involuntarios. A continuación, se explorará la grandeza de la durabilidad y la resistencia al trauma en un vestido de hombre.

Construcción robusta

La durabilidad de un reloj para hombre comienza con su construcción robusta. Los fabricantes de relojes utilizan materiales de alta calidad y técnicas de fabricación avanzadas para garantizar que el cierre resista el uso diario y posibles golpes.

Uno de los materiales más comunes en los relojes de hombre es el acero inoxidable. Este material es reconocido por su resistencia a la corrosión y durabilidad. Los relojes de acero inoxidable son capaces de resistir golpes y rayones sin perder su apariencia o funcionalidad.

Además del acero inoxidable, algunos relojes para hombre también están repletos de materiales como titanio o cerámica. Estos materiales son aún más fuertes y livianos, lo que los convierte en opciones populares para quienes buscan un reloj duradero y resistente a los golpes.

Vidrio tolerante a los rayones

Otro factor determinante en la durabilidad de un reloj de hombre es el cristal antiguo de la esfera. El cristal del reloj sobre moho debe ser resistente a los arañazos y capaz de soportar impactos sin romperse.

El cristal de zafiro es muy valorado en relojería debido a su dureza y resistencia al rayado. Este material es casi tan duro como el diamante y ofrece una excelente protección contra rayones en la cara visible.

Otros materiales utilizados en los relojes de hombre incluyen el vidrio mineral y el plexiglás. Aunque estos materiales pueden no ser tan resistentes a la eliminación como el cristal cerúleo, aún ofrecen un buen tributo contra impactos y rayones.

Impermeable

El agua subterránea es otro factor importante en la durabilidad de un reloj de hombre. Los hombres suelen usar sus relojes en una variedad de situaciones, como actividades al aire libre, natación o incluso bajo la lluvia.

Los relojes de hombre suelen tener una clasificación de agua subterránea que indica la profundidad a la que pueden hundirse sin sufrir daños. Esta clasificación se expresa en metros o la presión del agua en bares.

Es importante saber que la resistencia al agua de un reloj no significa que sea adecuado para actividades de buceo profundo. Los relojes diseñados para actividades en aguas puras, como el buceo profesional, deben cumplir estándares más rigurosos y tener características particulares, como una válvula de helio en la cola.

En general, para el uso diario y las actividades acuáticas normales, es suficiente un reloj con una resistencia al riego de al menos 100 metros o 10 bares. Este deseo asegura que la vista sea impermeable en situaciones comunes como nadar o ducharse.

Movimiento de calidad

La durabilidad y el impacto bajo tierra de un reloj también están influenciados por la calidad de su movimiento. El movimiento es la mecánica interna que impulsa el reloj y le permite funcionar correctamente.

Existen diferentes tipos de movimientos en los relojes de hombre, como el movimiento mecánico, el movimiento de cuarzo y el movimiento automático. Cada uno tiene sus propias características y niveles de durabilidad.

Los movimientos mecánicos, que dependen de la energía generada por el resorte real, son muy valiosos por su artesanía y tradición. Sin embargo, son más susceptibles a los golpes y pueden requerir mantenimiento.

Los movimientos de cuarzo, por otra parte, son más precisos y menos impresionables a los golpes. Estos movimientos utilizan una batería de sello para alimentar el reloj, lo que los hace más resistentes a los golpes y duraderos.